En los últimos días no deja de ser noticia y portada de telediarios y periódicos el fin de la crisis en España, la recuperación con la creación de nuevos puestos de empleo y la mejora en todos los sectores económicos en general. Consuelo de muchos, es posible, ya que después de años de lucha por “sobrevivir” una noticia así es como un soplo de aire fresco y de esperanza, pero también golpe de realidad para otros que quizá se preguntan hasta qué punto esto es así o hasta qué punto esto es producto de la cercanía inminente de elecciones en el país, así como el planteamiento de otra cruda verdad, habiendo llegado a extremos tan negativos como los alcanzados en los últimos años, ya no se podía ir a peor, no hay otro camino que la mejora, aunque sea mínima.
Ahora bien, cuando en el país se habla de creación de puestos de empleo y, por consiguiente, de notables disminuciones en las tasas de desempleo, ¿de qué tipo de empleo se trata? Consideramos imprescindible hacerse esta pregunta si, al menos, tenemos unas expectativas de mejora a largo plazo. Aquí, por supuesto, la respuesta va a depender de las ambiciones de cada quién, pero analicemos la situación, qué podemos esperar de contratos de trabajo que en muchos casos no alcanzan la duración de un mes o, por otro lado, con sueldos que casi traspasan los mínimos establecidos por la ley.
Mejora sí, podemos hablar de ella si datos así nos reconfortan, desde luego hemos salido del estado de recesión. Problema solucionado, eso no, el crecimiento que se observa es demasiado débil todavía y con ofertas frágiles y de dudosa calidad.
Si nos fijamos unos objetivos a largo plazo, la situación, por el momento, no resulta tan favorable como nos quieren hacer ver. Como pudimos leer hace unos días en un titular del Secretario General de Comisiones Obreras (CCOO) y presidente de la Confederación Europea de Sindicatos (CES), el señor Ignacio Fernández Toxo, “Los empleos precarios no generan solvencia económica”, a lo que también añadió, “Si España se limita a generar empleo precario, no sobrevivirá entre las naciones más desarrolladas”. Por tanto, y teniendo en cuenta estas informaciones, no sólo se trata de la creación de puestos de empleo, sino de la mejora de la calidad de dichos puestos.
Si hay una afirmación que puede resumir a la perfección lo anteriormente citado es que España estará recuperada finalmente de la crisis el día en que su gente recupere los niveles de bienestar y calidad de vida de los que gozaba años atrás, sin excesos, sin derroches, pero sí con la tranquilidad de tener un empleo y un salario dignos.
¿Qué hacemos hasta que llegue ese momento?
Desde luego quedarse con los brazos cruzados esperando nunca ha sido la forma correcta de encontrar una solución para nadie.
Las personas con verdaderas ambiciones, aquellas que desean un empleo de larga duración y estabilidad en sus vidas también abren fronteras y con ellas, objetivos y nuevas metas. Para ello contamos con opciones variadas, sólo es cuestión de querer y con ello, conseguir.
Una ventana a un futuro mejor es la que encontramos en Alemania, por ejemplo, donde cada día, se ven multiplicadas las ofertas de empleo y donde, cada día más, miles de españoles deciden ir a buscar esa proyección laboral y ese mejor porvenir que tanto anhelan. Una seguridad, en definitiva, que en España todavía no resulta posible a corto plazo.
Esta opción es de las más seleccionadas en la actualidad, según nos indicaba hace tan sólo unos días el “Periodista Digital”, en la actualidad unos 130.000 españoles se encuentran viviendo en Alemania, de los cuales un 10%, aproximadamente unos 50.000 de ellos llegó durante el pasado año. También se afirma que, a día de hoy, la emigración a éste ha crecido a un ritmo mucho mayor que en los últimos 40 años. Y es que, es en Alemania donde la mayoría de profesionales encuentran verdaderos trabajos a su medida, bien remunerados y valorados.
Somos totalmente libres para movernos y contamos con empresas como TTA Personal que facilita el acceso al mercado laboral alemán, prestando servicios tales como: mediación de ofertas de empleo, organización de cursos de idioma, preparación de entrevistas, financiaciones de viajes hacía el país y ayuda en la búsqueda del alojamiento.